El Sr. Berry llegó al Refugio de Esperanza del Condado de Pickens a través de la Oficina del Sheriff del Condado de Pickens tras ser encontrado vagando por las calles, perdido y sin un lugar seguro adónde ir. Vivía en una caravana inhabitable y presentaba síntomas de demencia severa, por lo que nuestro equipo colaboró con el DSS del Condado de Pickens para conseguirle un lugar en un centro de vida asistida. Al deteriorarse su salud, fue hospitalizado y, lamentablemente, falleció sin familia conocida. Dado que nuestro refugio fue el último hogar que conoció, nos encargamos de los preparativos de su funeral, y sus cenizas descansan ahora en nuestro vestíbulo, un recordatorio imborrable de que, para muchos, el Refugio de Esperanza del Condado de Pickens es su única familia.